Christian Krohg (Cristianía,
13 de agosto de 1852 - ib., 16 de octubre de 1925) fue un pintor, escritor y
periodista noruego. Fue hijo del juez Georg Anton Krohg, quien a su vez era
hijo del juez y político Christian Krohg, una figura importante en la redacción
de la constitución de 1814. Huérfano de madre a los 8 años, Christian siguió
los deseos de su padre de estudiar leyes, a pesar de que él prefería la
pintura. Mientras realizaba sus estudios de derecho, ingresó en la Escuela de
Artes y Artesanías de Cristianía, en Oslo. Su padre murió en 1873 y al año
siguiente Christian dejó su país para partir a Karlsruhe, Alemania, junto a su
amigo Eilif Peterssen, con el fin de estudiar en la Escuela Ducal de Arte de
Baden. Allí fue alumno de Hans Gude y Karl Gussow. Un año después se fue a estudiar
a la academia de Berlín. En esta última ciudad conoció a Max Klinger y Georg
Brandes, quienes influyeron en el desarrollo de Krohg en el naturalismo.
Su debut público sucedió en
una exposición de 1876, con la obra “Un Adiós”.
En el verano de 1879 visitó
por primera vez Skagen, en Dinamarca, y pronto se convertiría en uno de los
miembros más destacados de la colonia artística llamada los pintores de Skagen,
visitando varias veces esa localidad.
Trabajó en París en 1881 y
1882, y ahí tuvo contacto con el movimiento impresionista, conociendo, entre
otros, a Claude Monet. Regresó a la capital francesa de 1901 a 1909. En 1902
fue académico de la Academia Colarossi.
De regreso a Noruega en
1909, fue profesor y director de la Academia Noruega de Arte hasta 1925. Tuvo
entre sus alumnos a Edvard Munch.
Se casó en 1888 con la
pintora Oda Krohg. El matrimonio tuvo un hijo, Per Krohg, quien siguió los
pasos de sus padres en la pintura. Christian y Oda formaron parte de una
agrupación llamada Los Bohemios de Cristianía, un movimiento artístico-político
con sede en la capital noruega.
Inspirado en los ideólogos
del realismo, Krohg eligió pintar principalmente escenas de la vida cotidiana,
incluyendo los aspectos oscuros de ésta. Son especialmente conocidas sus
pinturas de prostitutas.
Su estilo fuerte y sencillo
hizo de él una de las más importantes figuras de la transición del romanticismo
al naturalismo, movimientos característicos del arte noruego de su época.
Colaboró en el diario
Verdens Gang como periodista, entre 1890 y 1910. También fue ilustrador de una
edición popular de la Heimskringla en 1899, una colección de sagas medievales
del autor Snorri Sturluson.
Escribió también una novela,
Albertine (1886), que trata de la vida de una prostituta. Los temas morales que
aborda causaron sensación en Noruega e hicieron que Krohg fuera llamado
"el artista de conciencia social". El libro fue prohibido y confiscado por la policía.
Fuentes:
Nota: La propiedad intelectual de las imágenes que aparecen en este blog
corresponde a sus autores y a quienes éstos las hayan cedido. El único objetivo
de este sitio es divulgar el conocimiento de estos pintores, a los que admiro,
y que otras personas disfruten contemplando sus obras.
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