sábado, 1 de marzo de 2014

Angel Badía Camps


En mi infancia, en el Bilbao de los años 60, todavía no existía una red de bibliotecas públicas donde los obreros aficionados a la lectura pudiesen conseguir libros prestados, así que esas personas alimentaban su afición leyendo novelas que se compraban en los quioscos y, sobre todo, se cambiaban por el módico precio de una peseta: llevabas la que habías leído y la cambiabas por otra. Recuerdo que había dos géneros básicos: las del oeste y las de amor. Recuerdo que durante una temporada, una de mis tareas era cambiar novelas para que mi hermano se las llevase al Cuartel de Garellano, donde estaba haciendo la mili, para entretener las largas horas de guardia.
Las portadas de aquellas novelas me entusiasmaban por su realismo, por su capacidad de transmitir lo que ibas a encontrar en el texto. Lo que entonces no imaginaba es que aquellas portadas eran auténticas obras de arte.
Vaya hoy, tantos años después, mi homenaje a Angel Badía por haber introducido unos retazos de belleza en aquella infancia marcada por el gris del cielo de Bilbao, del humo de los altos hornos y de la falta de calor humano que muchos emigrantes del sur encontramos en aquellas tierras a las que tuvimos que desplazarnos para poder encontrar en sustento diario.
Fuentes:
Nota: La propiedad intelectual de las imágenes que aparecen en este blog corresponde a sus autores y a quienes éstos las hayan cedido. El único objetivo de este sitio es divulgar el conocimiento de estos pintores, a los que admiro, y que otras personas disfruten contemplando sus obras.



















 








2 comentarios:

  1. Esse artista é o mesmo que desenhou esta arte de capa de Conan? https://scontent.fbfh5-1.fna.fbcdn.net/v/t1.0-9/15672509_180872742386313_5183946629444544343_n.jpg?oh=2d184f5e1fca8ef318ab5bbe94da9254&oe=58DC728F

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